El próximo miércoles 1 de Marzo, la granja vuelve a Piquio. Por tercer año consecutivo, traemos una granja de verdad a la escuela. Es sin duda una de las fechas del curso que más nos gusta. La posibilidad de tocar, escuchar y oler a los animales. Conejos, ovejas y un zorro. Una tortuga de cien años. Un búho, cabras que se comen los gorros. Así docenas de animales que les daremos de comer y jugaremos con ellos.
¿Por qué es tan importante esta actividad para los pequeños?.
En primer lugar, por ser un día especial. Las rutinas nos encantan, nos dan seguridad y nos hacen disfrutar del juego, de los amigos, de las actividades o tareas. Pero un día especial nos hace crecer, nos hace aprender y sorprendernos.
La posibilidad de traer la granja a Piquio es una experiencia inolvidable para los niños. Evitamos tener que coger un autobús y desplazarnos, de esta manera, los niños directamente se transportan saliendo al jardín de la escuela.
–Naturaleza. Interés por el medio natural. Unimos esta experiencia al día de día de lo que aprendemos con Eco-Escuelas. Una mezcla perfecta para coger conciencia del medio que nos rodea.
–Salir de la rutina. La sorpresa e ilusión por conocer lo nuevo.
–Relación de grupo. Es genial como los niños crean grupos para ver los animales. Se los enseñan unos a otros. Descubren algo desconocido juntos.
–Educativo. Trasladan sus conocimientos a la realidad. Saben reconocer los animales de los libros y sus sonidos. Verlos en vivo es el recurso educativo que les falta.
–Aprendizaje basado en la experiencia. Lo que aprendemos experimentando se aprende para siempre. Los peques están acostumbrados a aprender tocando, jugando, pintando, plantando… y ver a una mama pato, cuidar a sus patitos les enseña más que verlo en un libro. Ver al conejo comer zanahorias, a la cabra comer paja…
Esperamos hacer disfrutar mucho a los niños. Ilusionarse y esperamos que al llegar a casa por la tarde, os cuenten lo que ha pasado en su cole.